domingo, julio 13, 2008

mandala
su sonoridad relajada
resuena equilibrio
suspiro estable y berenjenal
frutal y de mantra
cargado de significaciones
que no exceden su latido
de resonancia
sus colores exóticos
su fuero fuego
su fuga avisada
que entre esas mismas reminiscencias
mandala
mandala
se deja enmarcar en el silencio
que rodea
su pronunciación.


2 comentarios:

Tomás Milton Horovitz dijo...

Acotación: Esto esta escrito cuando realmente no sabia bien que era un mandala y es honestamente una especie de oda a la sonoridad de la palabra. Ahora odio los mandalas, no me causan nada y me parecen resagos del estilo New Age y de espiritualismo barato.

Unknown dijo...

mandala m. En el budismo, imagen circular de carácter simbólico que representa el universo.

-Dic. María Moliner.

¿espiritualismo barato?
El espíritu no cotiza en bolsa!

Me gustó, me gusta y creo, siempre me gustará este poema.

Salu2 ToM!